SERENDIPITY

Empecemos por el final:
Cena a base de helados gigantescos en uno de los locales más famosos y cinematográficos de la ciudad, incluso hay una película titulada Serendipity (bastante moñas, por cierto). Mi cuñado Gonzalo y yo los únicos que hemos podido con todo, los demás han dejado bastante, había razones como se puede apreciar en la foto.



Vayamos al principio:
Central Park.
Los niños y Gonzalo padre se han alquilado una bicis y han dado una enorme vuelta y se han perdido, llegando más tarde de la hora (con la consiguiente penalización moneteria).
Mi hemana y yo, en principio ibamos a caminar, pero hemos decidido que ya estaba bien de cansancios y hemos alquilado un pequeño vehículo de tracción humana (un muchacho de Mali daba pedales) y el recorrido ha resultado de lo más agradable. Ya sabemos donde se han rodado un monton de pelis y donde viven o vivían algunas calebrities. Como dos señoronas.






La comida, típicamente americana, en un burguer típicamente americano. Deliciosas calorías y enorme ardor de estómago.



Por la tarde me he venido con los dos peques (Ana y Álvaro) a casa. Yo he dormido una siesta porque estaba muy cansada y ellos se han ido a jugar a la sala común (billar, ping-pong, futbolín), tan ricamente. Los demás de compras.
Hemos podido ver por internet el fiestón de Madrid con la selección. Una pasada, el encargado de la finca nos ha comentado al llegar lo alucinante que le parecía.
Y el final ya está contado.